De ideales originalmente federales, pero que luego mutaría hacia el partido unitario, tuvo que escapar de Ibarra y Quiroga durante su gobierno, cuando fuera invadida Catamarca y cae el gobierno, dejando el antiguo Cabildo (foto) en manos de los mencionados caudillos, y logró regresar con la ayuda del valeroso tucumano unitario, Gregorio Aráoz de Lamadrid.